Logra en 12 semanas lo que otros hacen en 12 meses
Los expertos en planeación estratégica Brian Moran y Michael Lennington afirman que cuando se conceptualiza un año en solo 12 semanas, se logra lo que la mayoría de la gente hace en un año. Las buenas ideas no determinan el éxito. Quienes tienen un alto desempeño son simplemente mejores para ejecutar sus ideas. Aprenda a avanzar hacia sus objetivos de manera más efectiva con el sistema único de los autores, mientras se mantiene motivado y responsable. Emplee sus tácticas basadas en investigaciones para transformarse en el director ejecutivo de su propia vida y cree un cambio duradero.
Ideas fundamentales
- Pensar en términos anuales es ineficaz. Mejor piense en periodos de 12 semanas.
- Las personas con alto desempeño no tienen mejores ideas, sino mejores sistemas de ejecución.
- No se resista al cambio. Acepte la incomodidad y cree una visión fuerte.
- Avance hacia sus objetivos de 12 semanas con un plan de acción semanal.
- Logre sus metas comprometido emocionalmente con acciones de alto impacto.
- Supere los obstáculos usando las últimas investigaciones de cambio a su favor.
- Un sistema efectivo de medición y puntuación impulsa el cambio.
- Administre su tiempo con un método de bloqueo que produzca resultados consistentes.
- Mantenga su rumbo y haga frente a verdades incómodas e identifique fallas en el desempeño.
- La conclusión de las 12 semanas marca una oportunidad para empezar de nuevo.
Resumen
Pensar en términos anuales es ineficaz. Mejor piense en periodos de 12 semanas.
La gente tiende a pensar en periodos anuales, pero ello resulta improductivo. También tiende a sentir que tiene mucho tiempo para lograr sus objetivos y, como resultado, no los logran de manera eficiente. Cuando conceptualiza un año en 12 semanas y planifica en periodos más cortos, su enfoque aumenta a medida que ejecuta acciones diarias y semanales.
“Cada uno de nosotros tiene la capacidad de ser grandioso. Serlo implica disciplina para hacer las cosas que sabe que debe hacer incluso cuando –particularmente cuando– no tiene ganas””.
Tres principios conforman el año de 12 semanas:
- Responsabilidad – Siempre pregúntese qué puede hacer para lograr los resultados deseados.
- Compromiso – Cumpla las promesas que se hace a sí mismo.
- Grandeza – Sobresalir en el momento presente con autodisciplina.
Las personas con alto desempeño no tienen mejores ideas, sino mejores sistemas de ejecución.
El sistema del año de 12 semanas puede ayudarle a tener éxito mediante sus cinco disciplinas:
- Visión – Motívese alineando sus metas personales y profesionales con una visión significativa.
- Planificación – Aumente sus probabilidades de éxito con un plan de 12 semanas.
- Control del proceso – Utilice herramientas y estrategias respaldadas especializadas para asegurar que usted ejecute efectivamente su plan diariamente.
- Puntuación – Mida su progreso y cree sistemas de retroalimentación.
- Uso del tiempo – Use su tiempo de forma intencionada y efectiva.
No se resista al cambio. Acepte la incomodidad y cree una visión fuerte.
Mucha gente no logra hacer cambios duraderos porque requiere sacrificar su comodidad. Su mejor defensa contra la resistencia al cambio es una visión poderosa, que le recuerda de lo que es capaz de llegar a ser si se apega a sus metas. Dese permiso para soñar en grande y asegúrese de tener una conexión emocional con su visión.
“La mayoría de los cambios fallan porque el precio requerido es demasiado alto. ¿Cuál es el precio final del cambio? Su comodidad””.
Intente hacer los siguientes cinco ejercicios para encontrar e implementar su visión:
- Imagínese a sí mismo dentro de cinco, diez y quince años – Visualizar el éxito futuro provoca que las neuronas del córtex prefrontal se echen a andar, las mismas que se activan cuando realiza acciones que se alinean con su visión. Está entrenando su cerebro para lograr sus sueños al imaginarlos primero.
- Haga tres listas – Enumere las cosas que le gustaría tener, lo que le gustaría hacer y todo lo que le gustaría ser en la vida. Céntrese en las cosas materiales y no materiales.
- Examine sus listas – Identifique lo que es lo más importante para usted. Luego, cree una visión a largo plazo de cinco, 10 y 15 años en el futuro.
- Cree una visión de tres años – Divídala en objetivos personales y profesionales. Puede crear una visión opcional de 12 meses si ello le ayuda a guiarse.
- Tome medidas para asegurar la responsabilidad – Comparta su visión con otras personas. Imprímala y manténgala cerca de usted. Dé pasos diarios para materializar su visión y reflexione sobre su avance al final de cada día.
Avance hacia sus objetivos de 12 semanas con un plan de acción semanal.
Cree objetivos de tres meses que sean personalmente significativos y asegúrese de que se alineen con su visión a largo plazo. Piense en sus objetivos como resultados que no puede controlar, pero que puede encaminar a través de acciones estratégicas. Trace resultados efectivos al asegurarse de que sus objetivos cumplan con los siguientes criterios:
- Sus metas son específicas y puede medir su éxito.
- Sus objetivos se centran en resultados positivos, en lugar de evitar resultados negativos.
- Sus metas son desafiantes, pero realistas.
- Está dispuesto a rendirse cuentas a sí mismo para alcanzar esos objetivos, incluso si significa sacrificar su comodidad.
- Puede alcanzar estas metas dentro de plazos específicos.
“El ciclo de ejecución de 12 semanas es un poderoso proceso que le permite alinear sus acciones con sus intenciones y ser lo mejor posible””.
Cree una lista de tácticas semanales o tareas diarias que puede terminar cada semana para alcanzar sus metas. Cree un mapa mental, una forma no lineal de generar ideas. Escriba su objetivo en el centro de una página y anote alrededor las acciones que podría realizar para alcanzarlo. Dibuje un círculo alrededor de cada una de sus ideas y una ideas relacionadas con líneas. Reduzca su lista visual a unas pocas acciones efectivas. Codifique tácticas claras con frases que empiecen con verbos e incluya plazos concretos. Asegúrese de que puede ejecutar estas acciones en el plazo de una semana y que no requieran pasos preliminares adicionales. No piense en su plan semanal como una lista de cosas por hacer. Debe reflejar la actividad estratégica necesaria para alcanzar sus objetivos.
Logre sus metas comprometido emocionalmente con acciones de alto impacto.
Cuando se compromete crea conexiones emocionales poderosas con un plan de acción y un resultado específico en mente. Cumplir con sus compromisos es importante porque cuando cumple los compromisos con los demás, fortalece las relaciones. Mantener los compromisos con sí mismo refuerza el respeto que tiene por usted y su integridad. Haga una lista de acciones de alto impacto que crea que le ayudarán a alcanzar sus metas. Anote los sacrificios, o costos, que tendrá que hacer para alcanzar sus metas. Si está dispuesto a hacer estos sacrificios, comprométase a ejecutar las tácticas necesarias durante los siguientes tres meses.
“Los compromisos son poderosos. En cierto modo, el compromiso es su responsabilidad proyectada hacia el futuro””.
Intente cumplir sus promesas, pero no se desanime si no logra alguno. Eso sucede. Pero si sigue sin cumplir sus compromisos, examine por qué no lo está haciendo. Luego, comprométase de nuevo a hacer los sacrificios necesarios.
Supere los obstáculos usando las últimas investigaciones de cambio a su favor.
Utilice herramientas y acciones especializadas para asegurarse de mantener el rumbo y alcanzar los resultados deseados.
“Lo que celebramos y lo que reconocemos refuerza lo que valoramos para nosotros mismos y para los demás. Es posible que no sea obvio, pero la celebración es una parte vital de un buen sistema de ejecución””.
Evite distraerse de la ejecución de su plan con las siguientes estrategias de control de procesos:
- Plan semanal – Cree un plan al comienzo de cada semana usando los gráficos incluidos en la guía de El año de 12 semanas. Dese un puntaje al final de cada semana con base en el porcentaje de tácticas semanales que haya completado. Incorpore las tácticas de su plan en su rutina diaria y consúltelo tres o cuatro veces al día para llevar un registro del progreso.
- Reuniones semanales de responsabilidad – Las personas que asisten a reuniones semanales de responsabilidad entre colegas tienen aproximadamente siete veces más probabilidades de cumplir sus compromisos a largo plazo. Programe reuniones semanales de 15 a 30 minutos con dos o tres compañeros para ofrecerse apoyo mutuo. Los miembros del grupo comparten el progreso hacia sus objetivos, sus obstáculos actuales y sus compromisos de la semana, mientras que todos proporcionan retroalimentación y estímulo.
- Charlas diarias – Reserve cinco minutos cada mañana para una charla regular con un máximo de tres personas. Comparta sus logros del día anterior y las acciones que espera tomar ese día.
- Tema de las 12 semanas – Elija una frase o palabra pegajosa que le recuerde sus prioridades y su visión, por ejemplo, “Hazlo tuyo” o “Gratitud”). Haga una lluvia de ideas sobre los temas hasta que encuentre uno con el que se conecte emocionalmente. Recordar su tema lo motiva a cumplir sus compromisos.
- Celebraciones del año de 12 semanas – Trate cada ciclo de 12 semanas como un año y programe una semana flexible para su decimotercera semana. Si logra sus metas, disfrute de una recompensa personalmente motivadora durante esa semana flexible.
Un sistema efectivo de medición y puntuación impulsa el cambio.
Mida los indicadores de avance y rezago para seguir el progreso hacia sus metas. Los indicadores de avance son marcadores de progreso temprano, mientras que los indicadores de rezago suelen reflejar sus resultados finales. Recuerde que está tratando de lograr en 12 semanas lo que la mayoría de la gente hace en un año, por lo que cada semana representa un mes.
“La medición impulsa la ejecución. Es el ancla de la realidad””.
Siga estos tres pasos para medir el progreso:
- Cree una lista de medidas clave que consista en indicadores de avance y rezago – Por ejemplo, la gente que quiere bajar de peso podría usar la cantidad de horas de ejercicio como indicadores de avance, mientras que un indicador de rezago podría ser el número de kilos que pierde.
- Siga el estado de las acciones que complete cada semana – Por ejemplo, si de 10 tácticas pendientes completa ocho, tiene un 80% de efectividad en la ejecución de su plan.
- Preste atención a sus métricas – Si no está teniendo buenos resultados, ¿qué hacer para ganar impulso? Avance cada semana y mejore la puntuación de su efectividad en la ejecución.
Administre su tiempo con un método de bloqueo que produzca resultados consistentes.
El “tiempo de desempeño” es un enfoque de bloqueo temporal particular del sistema del año de 12 semanas. Le da las herramientas para convertirse en el director ejecutivo de su propia vida y ser más intencional con el uso de su tiempo. Para aprovechar su tiempo de manera efectiva, adopte las siguientes creencias: comprenda que su tiempo es, por lo menos, tan valioso como el de los demás; reconozca que no puede hacer todo simplemente por trabajar duro y con rapidez, debe entrenarse para priorizar; aprenda a priorizar acciones estratégicas, de alto impacto y generadoras de dinero antes que las acciones de menor impacto, aunque parezcan urgentes; dese cuenta de que alcanzar un punto de inflexión requiere un cambio profundo en la forma de trabajar y una revisión de sus sistemas anteriores.
“Para obtener resultados diferentes, tendrá que hacer las cosas de manera diferente y hacer cosas diferentes””.
Cree una semana modelo de trabajo y programe tres tipos diferentes de segmentos de tiempo para diferentes actividades:
- Segmentos estratégicos – Programe segmentos de tres horas al menos una vez a la semana para abordar sus actividades de mayor prioridad sin interrupciones.
- Segmentos de amortiguación – Asigne segmentos de 30 a 60 minutos una o dos veces al día para acciones menos estratégicas pero aún urgentes, como responder correos electrónicos.
- Segmentos de escape – Bloquee tres horas para recargarse con una actividad que le guste y no tenga nada que ver con el trabajo, como ver una película o jugar golf. No se permita estas actividades al principio, sino que intente programar solo un segmento por mes hasta que esté seguro de que está ejecutando su plan semanal de manera efectiva.
Mantenga su rumbo y haga frente a verdades incómodas e identifique fallas en el desempeño.
Aumente sus probabilidades de alcanzar con éxito sus objetivos al analizar su desempeño cada semana y enfrentar cualquier fallo u obstáculos en desempeño que pueda encontrar. Considere asignarse 15 o 20 minutos por semana para darse un puntaje de ejecución semanal con los indicadores de avance y rezago que usted mismo eligió. Por ejemplo, puede utilizar la cantidad de reuniones con clientes cada semana como indicador de avance de éxito y la cantidad total de ingresos que obtiene como indicador de rezago. Calcule el porcentaje total de tus metas logradas cada semana con las medidas que ha elegido. Si no tiene tiempo para hacerlo, compruebe su avance una vez al mes.
“El camino para llegar a ser grandioso es simplemente hacer el trabajo, y eso suele ser incómodo””.
Conforme avance, identifique tendencias para el logro de sus medidas de avance y retraso, así como posibles problemas y riesgos que amenacen sus objetivos. Si evita cumplir sus compromisos o comprometerse con algún aspecto del plan, identifique esas áreas. Comprométase a actuar para compensar cualquier tendencia negativa que identifique en su desempeño.
La conclusión de las 12 semanas marca una oportunidad para empezar de nuevo.
Cuando complete las 12 semanas, lleve a cabo una revisión estructurada de su desempeño de ejecución y encuentre maneras de construir sobre sus éxitos. Revise sus puntuaciones semanales y anote qué porcentaje de cada objetivo ha logrado, y califique su desempeño con respecto a cada objetivo para el año total. Calcule su puntuación total para determinar su efectividad en la ejecución de su plan del año de 12 semanas.
Si obtuvo menos del 80% de efectividad, reflexione sobre qué áreas de su vida podrían estar desequilibradas. Considere su trabajo, su vida personal y familiar, su satisfacción con sus relaciones, su entorno físico y si está viviendo en consonancia con sus creencias espirituales. El equilibrio completo entre trabajo y vida es un mito. Planifique periodos intencionales de desequilibrio cuando necesite priorizar ciertos aspectos de su vida. ¿En qué aspectos le gustaría centrarse en el futuro?
“Llegar a ser grandioso, lograr un avance significativo, requiere ejecución, que no es una idea nueva. Las grandes ideas no valen nada salvo que sean ejecutadas””.
Cuando su año de 12 semanas termine, comience un nuevo plan de 12 semanas para construir sobre sus éxitos y lograr aún más. Clasifique su compromiso con las cinco disciplinas que componen su estrategia del plan de 12 semanas: visión, planificación, control de procesos, puntuación y uso del tiempo. Piense cuáles son las áreas de la estrategia que más trabajo le cuestan y debería emplear más eficazmente la próxima vez. Identifique sus logros más importantes. ¿Qué cambios puede hacer para lograr el doble la próxima vez?
